No puedo pagar la hipoteca ¿y ahora qué?

Hay distintas opciones si en tu mente resuena la frase “no puedo pagar la hipoteca“. Muchas entidades bancarias ofrecen diversos períodos de carencia. Es posible que se te conceda una ampliación de plazo, si bien en estos casos se suele pedir a cambio algún tipo de compensación equivalente.

La primera solución que te podemos dar es que hables con la entidad que te concedió el préstamo antes de pensar en cómo dejar de pagar la hipoteca.

Ten en cuenta que dejar de pagar la hipoteca que les corresponde de forma mensual sin ponerlo en conocimiento del banco, puede acarrear problemas muy graves a posteriori. Sin embargo, se puede optar a diversas soluciones para dejar de pagar la hipoteca durante un tiempo.

En la mayoría de los casos, cuando uno opta por buscar cómo librarse de la hipoteca no hay solución; las deudas crecen y se acaba ejecutando un desahucio. Pero ¿a qué soluciones puedes optar entonces si no es recomendable dejar de pagar la hipoteca voluntariamente?

¿Qué hago si no puedo pagar la hipoteca?

Hay ocasiones en las que en tu mente ha podido resonar: “no puedo pagar la hipoteca, ¿qué hago?” O bien, “estoy divorciado y no puedo pagar la hipoteca”. También, puede que tu caso haya sido pensar: “Estoy en paro y no puedo pagar la hipoteca”.

Tanto si quieres dejar de pagar la hipoteca de divorcio, como si estás en paro o si te has preguntado “si no puedo pagar la hipoteca, ¿puedo entregar la casa?”. Te recomendamos una serie de soluciones.

1. Disminuir tu cuota con carencia para dejar de pagar hipoteca temporalmente

Ahora, y especialmente tras la publicación de la sentencia del tribunal supremo sobre los gastos de hipoteca, los bancos están mucho más dispuestos a negociar con los clientes. Las soluciones a las que se está llegando en la actualidad son menos drásticas que antaño, aunque siguen habiendo consecuencias por no pagar la hipoteca.

La disminución de la cuota con carencia significa que la entidad te permitiría pagar exclusivamente los intereses del préstamo. Pues no se amortizaría el capital y el importe del banco no bajaría. También puede ocurrir que pagues tan solo una diminuta cuota del capital durante un período aproximado de un año.

2. La reducción del tipo de interés si no puedo pagar la hipoteca

Esta solución que pueden ofrecerte las entidades bancarias va a depender de tu situación. La reducción del tipo de interés consiste en una ampliación del plazo. El período en el cual se produce es aproximadamente de 40 años.

Las cláusulas de los préstamos son en gran parte abusivos en la actualidad. Por ello, debes conocer qué son los gastos notariales y reclamarlos.

En este caso, la finalidad es igual a la que tenías al comienzo de plantearte este problema: vas a reducir la cuota mensual. Esta solución te puede ayudar a la hora de buscar la salida a una mala racha, pero al final puede que el pago se haya incrementado. Aunque al principio el tipo de interés es más bajo, al final será con suerte similar, pero puede que sea más alto.

3. La quita de la deuda para saber cómo librarse de la hipoteca

El supuesto de la quita de la deuda es poco habitual. Sin embargo, consiste en una reducción que podrías conseguir si el pago de la hipoteca supone más del 60 % de tus ingresos. Además, tendrás que haber aplicado de una manera previa las tres posibles soluciones anteriores.

Aquellos que consiguen la quita de la deuda para saber cómo librarse uno de la hipoteca, pueden conseguir vender el inmueble por precio de mercado y quitarse la deuda.

4. La dación en pago

En el caso de la dación en pago, también los demás supuestos deberán haberse intentado sin éxito. Además, el pago del préstamo hipotecario deberá ser superior al 60 % de tus ingresos y el valor del inmueble no ser más alto de una cantidad establecida.

5. Subrogación y cancelación del préstamo

La subrogación supone que tu deuda se pase a otro banco. Así, será posible que vuelvas a renegociar todas las opciones anteriores en caso de que no hayan tenido éxito, sin tener que afrontar las consecuencias de dejar de pagar la hipoteca. No obstante, debes saber que estarás sujeto a una comisión.

Asimismo, el nuevo banco podrá volverte a cargar los gastos que ya abonaste sobre notaría y registro, además de las gestiones. En este caso, debes saber cómo proceder a la reclamación para conseguir la devolución de los gastos de hipoteca, ya que ese dinero te corresponde.

No puedo pagar la hipoteca y tengo aval

Si no puedes pagar la hipoteca, incluso si tienes aval, hay varias soluciones que te conviene conocer. El gasto final que tengas que desembolsar es posible que crezca, junto al plazo para realizar el pago. Esto se debe a la reestructuración y a las comisiones fundamentalmente. No obstante, no tendrás que volver a agobiarte pensando “qué hacer si no puedo pagar la hipoteca“.

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