¿Dónde reclamar los gastos de hipoteca?

El Tribunal Supremo ya ha declarado reiteradamente que muchos de los gastos que tienes que asumir en el préstamo de tu hipoteca son realmente abusivos. Por ello, dichos gastos están incluso llegando a los tribunales. El problema de los consumidores cuando deciden abrir un proceso para recuperar su dinero es no saber dónde reclamar los gastos de hipoteca. A continuación, te explicamos más sobre los gastos notariales, dónde y cómo hacerlo.

La mayoría de los jueces, por no decir la práctica totalidad, están dando la razón a los usuarios que han firmado dichos préstamos. Tras ello, los bancos están teniendo que encargarse de asumir una gran parte de estos costes.

¿Cómo y dónde reclamar los gastos de hipoteca?

En primer lugar, tenemos que aclararte en qué consisten los gastos hipotecarios. Los gastos de hipoteca son unas cantidades que tienes que abonar en la firma de tu préstamo, a veces incluso de manera previa a que se produzca la misma.

Los gastos dependerán de la vivienda y de su ubicación, así como de la comunidad autónoma y de la cantidad dineraria del préstamo. No obstante, la cantidad suele rondar los tres mil euros y engloba los aranceles notariales, los impuestos del IVA y del AJD o los gastos del Registro la Propiedad, entre otros.

Si tu préstamo hipotecario aún está vigente o incluso, si has terminado de pagarlo, siempre con más limitaciones, puedes realizar la reclamación de los gastos.

No importa que lo firmaras antes de que el Alto Tribunal dictara la sentencia, ya que esta tiene carácter retroactivo. Es decir, tiene efectos en cuanto a los préstamos anteriores a dicha sentencia y no solo a los que se firmen de ahora en adelante.

Si bien será suficiente si presentas una reclamación de tipo formal ante el banco que te concedió el préstamo, tenemos que señalar que en ocasiones los procesos se complican. Por ello, te recomendamos acudir a abogados expertos en reclamaciones de préstamos hipotecarios.

Así, los expertos te asesorarán, te resolverán las dudas y además, te llevarán adelante los trámites necesarios informándote sobre cuánto dinero puedes recuperar. A su vez, te ayudarán con el papeleo que tienes que aportar como por ejemplo la escritura del préstamo hipotecario.

Si no tienes la escritura del préstamo, no pasa nada. Podrás pedir un duplicado en el Registro de la Propiedad. Además, para la reclamación de tus gastos de formalización en relación con tu hipoteca tienes que adjuntar varias facturas. Estas facturas son: la del notario, la del registro, la del tasador y la de la gestoría.

En el caso de que no tengas tus facturas, puedes solicitar las copias en la notaría a la que acudiste o en la gestoría. Por ahora, no se ha hablado de límites en cuanto al momento en el que se canceló la hipoteca. Sin embargo, el plazo máximo para que recibas el dinero en tu cuenta una vez que la sentencia te haya sido favorable es como máximo de dos meses.

Tipos de préstamos hipotecarios

En cuanto a los tipos de préstamos hipotecarios existentes, son muchas las modalidades que puedes encontrar. A continuación, te vamos a contar cuáles son las más habituales.

Las primeras que puedes elegir son el préstamo con un tipo de interés fijo y otra con interés variable. Estas son fáciles de entender porque es tan sencillo como que una fluctúa y la otra no. Sin embargo, también podemos encontrar la de tipo mixto. Estas últimas tienen un interés fijo al principio y cuando pasa un determinado plazo se hacen variables.

A su vez, tenemos las de cuota fija, con una determinada cantidad mensual y la hipoteca inversa o pensión hipotecaria. La cualificada es aquella que se pacta por el Ministerio de Vivienda con las Entidades Financieras y la de subrogación la que te permite cambiar tu préstamo.

Asimismo, la flexible te permite elegir las modalidades, las de carencia son las que no amortizan capital durante un tiempo (suelen ser para personas jóvenes) y las multidivisa, que juegan con el interés de otros mercados. Por último, la hipoteca puente se suele utilizar para segundas viviendas y las de autoconstrucción cuando el propietario es, a su vez, promotor de su vivienda.

En los últimos años se ha convertido en una práctica habitual que los bancos impongan a pagadores, como tú, la cobertura de todos los gastos, incluyéndolos en una cláusula. Sin embargo, estos gastos, tal y como hemos explicado, son abusivos y no tendrías por qué pagarlos aunque seas tú quien haya pedido el préstamo hipotecario.

Por ello, si quieres recuperar tu dinero, te ayudamos a reclamar tu hipoteca. Con el asesoramiento y la experiencia de nuestros expertos, el proceso será rápido, sencillo y además, sabrás dónde reclamar los gastos de hipoteca.

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